El bajista AQR suma el 0,51% de Bankinter en pleno retroceso bursátil
El bajista AQR Capital reaparece en Bankinter con un ataque del 0,51% del capital social, según los registros de la CNMV, en plena corrección del sector en bolsa tras desatarse las ventas en los parqués por las actuaciones de los bancos centrales y el temor a la estanflación.
El fondo de cobertura estadounidense retorna a Bankinter con una posición superior al 0,5% del circulante, el mínimo que la CNMV comunica públicamente, 13 meses después de bajar su posición de dicho umbral.
El vehículo de inversión fundado en 1998 por cuatro antiguos ejecutivos de Goldman Sachs capitaneados por Clifford S. Asness entró por primera vez en Bankinter en agosto de 2020 y suma una decena de operativas sobre el valor que sumaron un máximo del 0,62% contra la entidad a finales de abril del año pasado.
El fondo de cobertura también tiene abierta una posición contra Cellnex, del 0,5%, compañía sobre la que lleva más de un lustro operando en corto y siempre ha mostrado su gusto por grandes valores del Ibex 35 como Inditex, Banco Santander, Iberdrola o Caixabank.
El ataque actual de AQR Capital sobre Bankinter, con un nutrido equipo de físicos e informáticos que basan sus operativas en algoritmos, llega en un momento delicado para las acciones.
La entidad se sumó a las fuertes pérdidas del sector a cierre de semana y retrocedió el 6,74% el viernes, hasta los 5,6 euros por acción, lastrado por el temor a la estanflación que se desató en los parqués.
La situación para el valor no ha mejorado en el arranque de semana, pues pasada la primera hora de negociación los títulos pierden más del 5%, la mayor caída del IBEX 35, hasta los 5,35 euros por acción.
Los inversores descuentan con sus ventas que el escenario para la banca empeora a causa de la llegada de una ralentización de la economía y que la subida de los tipos de interés por parte de los bancos centrales no será suficiente para mejorar la rentabilidad de las entidades.
Pese a que el incremento de precios es beneficioso para las condiciones de los créditos bancarios, el miedo a la recesión, entienden los expertos, hará que las entidades cierren el grifo del crédito para blindarse ante las posibles situaciones de impago.
El coronavirus provocó que los bancos protegiesen sus balances con fuertes provisiones, aún activas, pero la invasión a Ucrania y la actual combinación de ralentización económica e inflación puede llevar al sector a incrementar las dotaciones y producirse una merma del negocio.